Junto a la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Ejecutados Políticos de Paine, el Mandatario recorrió el memorial y encabezó un acto de conmemoración por los 51 años del Golpe de Estado.
Este miércoles 11 de septiembre, tras encabezar un acto de conmemoración por los 51 años del Golpe de Estado en el Palacio de La Moneda, el Presidente de la República, Gabriel Boric Font, recorrió el “Memorial de Paine, Un lugar para la memoria” junto a la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Ejecutados Políticos de Paine; el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero; la ministra Secretaria General de Gobierno, Camila Vallejo; la ministra de Bienes Nacionales, Marcela Sandoval; y la subsecretaria de Derechos Humanos, Daniela Quintanilla.
Este memorial, el único sitio de memoria ubicado en un sector rural de la Región Metropolitana, se compone de un bosque de casi mil postes de madera y 70 espacios de ausencia, con un mosaico en ellos que recuerda a cada una de las víctimas desde su experiencia de vida.
“Durante mucho tiempo las agrupaciones de familiares de detenidos desaparecidos y ejecutados políticos fueron incómodas para la política. Yo no estoy incómodo, yo estoy agradecido de ustedes y las admiro profundamente todo lo que han hecho y por haber mantenido viva la memoria”, señaló el Mandatario.
“Tenemos la tarea de transformar ese dolor en esperanza y en acción, porque ellos (los detenidos desaparecidos y ejecutados políticos de Paine) creían en un Chile más justo, en un Chile con dignidad. Nosotros, 51 años después, estamos peleando por lo mismo”, agregó.
Entre septiembre y noviembre de 1973, se llevó a cabo una persecución sistemática que terminó con la ejecución y desaparición de 70 hombres de Paine, en su mayoría, campesinos vinculados a sindicatos o al proceso de Reforma Agraria.
50 de ellos eran obreros agrícolas, 7 agricultores, 7 estudiantes, 2 comerciantes, 1 profesor, 1 mecánico, 1 obrero y 1 empresario. Tenían entre 20 y 45 años y el 71% no tenía militancia política. En total, 37 hombres fueron detenidos desaparecidos y 33 ejecutados.
En proporción al número de sus habitantes, Paine es la comuna con la tasa más alta de detenidos desaparecidos y ejecutados políticos en dictadura.
“El ensañamiento con los campesinos, trabajadores de Paine, fue brutal justamente porque representaban a una clase que estaba haciéndose visible con la Reforma Agraria (…) Hoy soy el Presidente de la República y representante del Estado de Chile, y como tal, siento el deber de, a ustedes, las familias, pedirles perdón a nombre del Estado de Chile”, aseguró el Presidente.
“Estamos trabajando firme con el Plan Nacional de Búsqueda, que lo que hace es asumir como un deber del Estado el reconstituir la trayectoria de cada uno de los detenidos desaparecidos y ejecutados políticos. Eso tiene un valor que va a trascender a este Gobierno porque tiene que ser una política de Estado, y que no les quepa duda que la vamos a defender estemos donde estemos. Pero también de seguir buscando, de no dejar de buscar”, añadió.
Y agregó: “Sepan que cuentan con nosotros como Gobierno y, existencialmente, también como compañeros y compañeras”.